Coche híbrido, combustible o eléctrico, ¿cuál elegir?
¿Estás dudando sobre si adquirir un coche híbrido, combustible o eléctrico? Te contamos aquí los pros y contras de cada uno de ellos.
En estos momentos, elegir un coche se parece cada vez más a elegir un teléfono móvil o un ordenador portátil. Las prestaciones, opciones y tipos que vas a encontrar son tan variados que escoger el ideal para ti puede volverse una auténtica odisea.
Para que no te abrumes y no seas víctima de la parálisis por análisis, vamos a ofrecerte aquí una pequeña guía de compra con los tipos de coche que puedes encontrar en el mercado y qué debes valorar antes de realizar una compra.
¿Qué debes tener en cuenta antes de comprar un coche nuevo?
La respuesta simple es "muchas cosas", pero vayamos más allá. Anteriormente ya te hablamos de qué debes tener en cuenta a la hora de adquirir un coche de segunda mano, donde puedes tener una pequeña base.
En realidad, esto es un poco de sentido común aplicable a muchos ámbitos de la vida y una vez te pares a pensar verás como poco a poco vas acotando el filtro hasta tener claro lo que quieres.
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lo primero que debes valorar es tu presupuesto. ¿Cuánto dinero tienes? ¿Cuál es tu umbral de gasto? Aclara esto lo antes posible porque aquí es donde empezará tu punto de negociación.
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lo segundo que hay que plantearse es el uso que le vas a dar: ¿tienes que ir a trabajar con él? ¿Estás pensando en viajar todos los fines de semana? ¿Necesitas moverte por la ciudad a menudo con tu vehículo o prefieres otras alternativas como bicicletas o monopatines eléctricos? ¿Es una alternativa para no depender tanto del transporte urbano?
Parecen preguntas sencillas, pero esconden cierta filosofía detrás: un coche es un gasto serio no solo por el objeto en sí, sino por los gastos extra que supone: ITV, Impuesto de circulación, seguro y mantenimiento. Los tres primeros son gastos obligatorios, aunque puedes valorar opciones como el renting si no quieres comerte la cabeza demasiado.
Sin embargo, lo que sí o sí deberás mirar con detenimiento es el combustible, porque es un gasto que debes asumir tanto si tienes el vehículo en propiedad como si es de renting. Y te contamos de antemano que el tipo de coche que compres influye y mucho en la cantidad de dinero que vas a invertir en este aspecto.
Una vez tengas claro cuánto presupuesto vas a destinar a tu vehículo y el uso que vas a darle, es hora de enfrentarse al amplio catálogo de opciones que hay enfrente de ti.
Como puede resultar un poco confuso al principio, te contaremos directamente las ventajas e inconvenientes de cada tipo para que puedas valorar el que más cuadra contigo.
Tipos de coche según el combustible: ¿cuál te conviene más?
Te adelantamos que puedes encontrar hasta seis tipos de motores según combustible. Repasemos con detenimiento:
Coches con motor de gasolina
Son aquellos que se encienden mediante una chispa fruto de la mezcla entre el combustible y el aire comprimido.
Algo que debes tener en cuenta es que los motores de gasolina consumen más. Esto no tiene por qué ser una desventaja pero sí es algo a valorar. Lo bueno que tiene es que la gasolina es más barata que el diésel, y más ahora con las restricciones por emisiones.
El coche con motor de gasolina es para ti si:
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no vas a hacer muchos kilómetros al año (menos de 15000 km aproximadamente);
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quieres un coche pequeño o no muy aparatoso, pues el peso influye y mucho en el consumo del vehículo de gasolina. Si quieres un SUV o vas a llevar un remolque, valora mejor otras opciones porque puede resultarte un gasto anual muy elevado.
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vas a realizar tramos por ciudad o trayectos cortos, tienen mejor respuesta de arranque y son más ligeros a la hora de soportar frecuentes paradas y arranques.
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no quieres problemas a la hora de entrar en grandes ciudades con restricciones, pues los diésel en este sentido están muy perseguidos.
Coches con motor diésel
Son actualmente los menos aprobados a nivel social y político por su impacto medioambiental, pero lo cierto es que son los más eficientes del mercado (sin contar el de motor de hidrógeno).
El coche con motor diésel es para ti si:
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vas a hacer 20000 km o más al año, ya sea por viajes de trabajo u ocio;
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tienes previsto realizar viajes largos, porque su consumo es mucho más contenido;
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quieres un vehículo grande, ya sea para transportar remolque o equipaje, porque mantienen mucho mejor el control del consumo;
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no vives en una ciudad grande, dado que las restricciones a los diésel son más severas y en algunas comunidades están muy limitados.
Coches propulsados a gas GLP o GNC
Son las siglas de Gas Licuado de Petróleo y Gas Natural Comprimido. Su motor es predominantemente gasolina, pero tienen además un segundo depósito independiente con gas que permite aumentar de forma muy interesante su autonomía.
El coche a gas GLP o GNC es para ti si:
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buscas algo ecológico, los gases GLP y GNC son los segundos menos contaminantes (por debajo del hidrógeno);
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vives en una gran ciudad con restricciones, estos coches tienen automáticamente la etiqueta ECO;
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buscas muchísima autonomía para viajes largos, puedes alcanzar hasta los 1300 km sin repostar, lo que lo hace también ideal para ahorrar en trayectos largos.
Coches híbridos
Son los que más verás en anuncios, pues se han vuelto muy populares en detrimento del diésel.
Cuentan con un motor térmico de gasolina apoyado por otro eléctrico, reduciendo así consumo y emisiones.
El coche híbrido cuenta con diversas ramas: híbrido enchufable, híbrido no enchufable e híbrido suave (o mild hybrid).
Aunque no nos extenderemos aquí sobre cómo es cada uno, en rangos generales puedes plantearte un híbrido si:
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quieres contar con beneficios fiscales, estos coches en las grandes ciudades tienen una deducción de impuestos;
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haces muchos trayectos por ciudad, porque su consumo es más reducido en este ámbito;
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no cuentas con puntos de recarga en tu zona, ambos motores se retroalimentan entre sí;
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eres un conductor tranquilo, pues la autonomía del motor eléctrico se puede aprovechar al máximo cuanto mayor tiempo se le deje reposar.
Coches eléctricos
100% ecológicos, 0% de emisiones y probablemente en un futuro no lejano serán los únicos coches que veremos siempre circular.
Cuentan también con diversos tipos: de batería, de pila de hidrógeno y de batería extendida. Solo decir que la pila de hidrógeno es probablemente la más eficiente, pero también la más cara de producir. Ningún coche con esa tipo de motor baja de los 70000€.
El coche eléctrico es para ti si:
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estás plenamente concienciado con el medio ambiente y buscas emisiones cero;
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si vas a hacer trayectos cortos, pues la pega que tienen estos coches es la carencia de puntos de recarga habilitados y las baterías son su punto más débil;
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buscas ventajas fiscales, al igual que con los híbridos, interesante si vives también en ciudades grandes (tienen la etiqueta CERO);
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vas a conducir principalmente por ciudad, responden con máxima eficacia.
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