¿Qué es y cuándo debes cambiar la correa de distribución de tu vehículo?

¿Lo sabes todo sobre la correa de distribución de un coche? Si no es así, echa un vistazo a nuestro post y te contaremos qué es y cuándo cambiar una correa de distribución de un vehículo a motor.

Para que tengas una idea aproximada, un coche normal tiene aproximadamente unas 90 000 piezas que están conectadas e interrelacionadas entre sí para que todo funcione como es debido.

Obviamente, no todas las piezas tienen la misma relevancia. Algunas son tuercas, cables, fáciles de sustituir. Sin embargo, otras como el motor de arranque o la correa de distribución son elementos clave sin los cuales el coche no puede funcionar bien. De hecho, sustituirlas puede salirnos por un pico.

En el caso de la correa de distribución, hay que prestar atención especial a su vida útil, puesto que una revisión periódica de tu vehículo hará que no te lleves un disgusto más adelante.

Si quieres saber más, quédate, que te vamos a contar qué es y cuándo debes cambiar una correa de distribución para que tengas todo perfectamente claro en todo lo relativo a este elemento.

¿Qué es una correa de distribución de un vehículo a motor?

Una correa de distribución es un elemento con forma de "cuerda" que coordina el movimiento del cigüeñal y el árbol de levas. Así, las válvulas se abren y se cierran sin golpearse entre los pistones.

Se trata de una tira de caucho con el interior dentado para permitir el paso de la energía mecánica entre un piñón de arrastre y el otro arrastrado e impedir que se desplacen cuando no les corresponde.

No son lo mismo que las cadenas de distribución, las correas son por lo general más baratas, pero tienen una duración menor.

Su objetivo es que precisamente esa apertura y cierre de válvulas sea en el momento adecuado mientras los cilindros salen y entran. La primera correa creada fue en el año 1945, utilizada en un vehículo de carreras. Sin embargo, no fue hasta 1962 hasta que empezaron a incluir esta pieza en coches de producción.

Obviamente, es un elemento que con el paso del tiempo y el rodaje necesita ser sustituido, siendo además una avería bastante frecuente, aunque no imposible de prevenir.

Es decir, rara vez se rompe de golpe la correa de distribución, sino que más bien suele tener un desgaste propio del uso, lo que hará que tu coche suene raro o se comporte de forma atípica. Si adquieres un coche de segunda mano , es una pregunta clave que tendrás que realizar para calcular más o menos el tiempo de vida útil estimado que pueda quedarle.

¿Cuándo debes cambiar la correa de distribución de tu vehículo?

Como ya hemos comentado, la correa de distribución es un elemento que suele sufrir desgaste y tiene una duración limitada.

Aquí la pieza clave para saber qué hacer será que consultes el libro de mantenimiento de tu coche y echar un vistazo al periodo de vida establecido por el fabricante. Cada tipo de motor cuenta con una correa de distribución concreta y lo mejor es que en caso de duda consultes a tu mecánico de confianza.

Para que tengas una aproximación, la vida útil de una correa suele oscilar entre los 60 000 y los 160 000 kilómetros, o entre cuatro y seis años. Aún así, hay ciertos "síntomas" que puedes controlar para saber cuándo te toca cambiar tu correa de distribución:

● Ruidos raros: quizás este síntoma pueda ser un poco más ambiguo, pero si ves que tu coche no suena como debería, no lo descartes y llévalo a un profesional.

● Vibraciones excesivas: cuando tu coche vibra demasiado aún estando en ralentí, la correa debe cambiarse. De hecho lo notarás porque también temblará demasiado durante toda la conducción. Debes llevarlo cuanto antes porque eso castiga a los pistones y las válvulas y el arreglo puede costarte aún más caro.

● La correa tiene signos de desgaste: grietas, dientes mal definidos, no hay tensión, etc.

● El coche tiene dificultades en el arranque: esto también es un signo claro (siempre que no te hayas dejado la batería del coche dada demasiado tiempo). Por lo general, si tarda demasiado en ponerse en marcha o no arranca, es casi seguro por culpa de la correa.

● Demasiado humo: por lo general todos los coches expulsan cierto humo, pero si tienen fallos en la combustión, expulsarán aún más humo del que debería y suele ser señal de que la correa está a punto de reventar.

● Manchas de aceite: esto puede ocurrir debido al roce de todos los componentes del vehículo, pero no es seguro y hay que asegurarse de que no haya fisuras.

¿Hemos aclarado tus dudas sobre las correas de distribución? Recuerda que en Talleres XXI disponemos de una amplia red de servicios que prestarte en caso de que necesites una revisión urgente por culpa de la correa de distribución. Todo además a un precio mucho más asequible de lo que imaginas.

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