Todo sobre los sistemas de retención infantil en España

En España, la seguridad de los niños en los vehículos es una preocupación constante. Por esta razón, la normativa española establece que todos los menores que miden menos de 135 centímetros de altura deben viajar siempre en un sistema de retención infantil adecuado a su edad y peso.

La utilización de estos sistemas es una manera de velar por su bienestar y seguridad en los trayectos por carretera. Además, son muy fáciles de instalar y resultan efectivos para reducir el riesgo de que los niños sufran lesiones de carácter grave e incluso mortales en caso de accidente.

En este post, vamos a explicarte más en profundidad qué se considera un sistema de retención infantil, cómo elegir el mejor y qué dice la normativa española y la DGT al respecto.

¿Qué es un sistema de retención infantil?

Cuando hablamos del sistema de retención infantil nos referimos a lo que en términos coloquiales se llama la silla de coche o la sillita infantil. Se trata de un dispositivo que se coloca en los vehículos para que los menores vayan sujetos y seguros.

Es importante destacar que estos dispositivos deben estar homologados de acuerdo con las normas del Reglamento CEPE/ONU 44/03 o de la Directiva 77/541/CEE o del Reglamento CEPE/ONU 129 o de cualquier adaptación posterior. Además, los dispositivos de retención de niños se deben instalar de acuerdo con las instrucciones que haya facilitado su fabricante.

Existen diferentes sistemas de retención infantil, en función de la estatura del niño y su peso. En líneas generales, los más habituales son la silla nido, la silla convertible y el elevador con respaldo.

¿Cómo elegir el mejor sistema de retención infantil?

A la hora de elegir el mejor sistema de retención infantil, debemos tener en cuenta varios aspectos. 

Lo primero es asegurarnos de que el dispositivo que vamos a utilizar está homologado y cumple con todas las normativas de seguridad vigentes.

Además, es importante tener en cuenta la edad y el peso del niño, ya que existen diferentes sistemas de retención infantil según estas variables. La silla nido, por ejemplo, es adecuada para los recién nacidos, hasta que alcanzan los 13 kg de peso aproximadamente.

Por otro lado, la silla convertible es para niños de entre 1 y 3 años que pesan entre 9 y 18 kilos. En este caso, la silla se puede instalar de frente o de espaldas a la marcha, dependiendo de la edad y el peso del niño.

Finalmente, el elevador con respaldo es para niños de entre 3 y 12 años que miden entre 125 y 150 centímetros de altura. Este dispositivo eleva al niño para que el cinturón de seguridad del vehículo se adapte a su cuerpo y le proteja en caso de accidente.

¿Cómo instalar correctamente un sistema de retención infantil?

La correcta instalación de los sistemas de retención infantil es fundamental para garantizar la seguridad de los niños en los vehículos. Para ello, es importante seguir las instrucciones del fabricante y asegurarse de que el dispositivo está bien fijado al asiento del vehículo.

Además, es importante recordar que los niños siempre deben ir en los asientos traseros del vehículo, salvo excepciones como cuando el vehículo no tenga asientos traseros, cuando todos los asientos traseros estén ocupados por otros niños o cuando no sea posible instalar el sistema de retención infantil en los asientos traseros.

Normativa sobre sistemas de retención infantil en la UE

A nivel europeo, la normativa sobre sistemas de retención infantil también es muy estricta. 

La Directiva 2014/37/UE de la Comisión Europea establece que los niños de estatura inferior a 1,50 metros que ocupen vehículos de las categorías M1, N1, N2 y N3 provistos de dispositivos de seguridad deberán quedar sujetos por un dispositivo de retención de niños con arreglo a talla y masa o peso.

Esta directiva también señala que si no están provistos de dispositivos de seguridad, no podrán viajar niños de menos de tres años de edad. Los niños de tres o más años de edad pero de estatura inferior a 1,50 m deberán ocupar un asiento que no sea ninguno de los de delante, es decir, deberán ir detrás.

¿Qué dice la DGT al respecto de las sillas infantiles?

La DGT (Dirección General de Tráfico) en España establece que todos los niños menores de 135 cm de altura deben viajar en un sistema de retención infantil (SRI) adecuado a su peso y talla. 

Los SRI se clasifican en cinco grupos en función del peso y la altura del niño:

• Grupo 0: hasta 10 kg
• Grupo 0+: hasta 13 kg
• Grupo 1: de 9 a 18 kg
• Grupo 2: de 15 a 25 kg
• Grupo 3: de 22 a 36 kg

Se deben instalar en el asiento trasero del vehículo, abrochando al niño con los cinturones de seguridad del coche y al ser posible en sentido contrario a la marcha hasta que el niño alcance los 15 meses de edad, ya que es la posición más segura en caso de accidente.

Además, no usar un SRI es una infracción grave de tráfico que puede conllevar una multa de 200 euros y la retirada de cuatro puntos del carné de conducir.

¿Cómo elegir la mejor silla de coche para niños?

A la hora de elegir la mejor silla de coche para niños, es importante tener en cuenta no solo la seguridad del dispositivo, sino también otros aspectos como la comodidad y la facilidad de uso:

• Debemos asegurarnos de que el dispositivo está homologado y cumple con todas las normativas de seguridad vigentes. Además, debemos tener en cuenta la edad y el peso del niño para elegir el sistema de retención infantil adecuado.
• Es importante elegir una silla de coche que tenga un buen acolchado y que se adapte bien al cuerpo del niño. Además, es recomendable elegir una silla con reposacabezas regulable para garantizar una mayor comodidad y seguridad en caso de impacto.
• Por último, es importante elegir una silla de coche que sea fácil de instalar y de utilizar. Para ello, podemos buscar dispositivos que tengan sistemas de anclaje ISOFIX o que se puedan instalar con cinturón de seguridad.

¿Cómo detectar una silla de coche en mal estado?

Es fundamental revisar regularmente el estado de la silla de coche para asegurarnos de que está en buen estado y que cumple con todas las normativas de seguridad vigentes. 

Algunas señales que pueden indicar que la silla está en mal estado son:

• Las correas están rotas o desgastadas.
• El acolchado está deteriorado o desgastado.
• El sistema de anclaje no funciona correctamente.
• La silla ha sufrido un accidente de tráfico.
• La silla es demasiado antigua y no cumple con las normativas de seguridad actuales.

Si detectamos alguna de estas señales, es importante sustituir la silla de coche por una nueva que cumpla con todas las normativas de seguridad vigentes.

 

En definitiva, la seguridad de los niños en los vehículos es una cuestión que nos concierne a todos. Utilizar un sistema de retención infantil adecuado es fundamental para garantizar su bienestar y seguridad en los trayectos por carretera.

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